Cuando venía peleando por el top 5 de la carrera, Jonatan Castellano recibió un toque de atrás apenas en la cuarta vuelta de competencia por parte del debutante Marcelo Agrelo. Por este motivo la Dodge naranja entró en trompo y se llevó a la rastra al campeón Agustín Canapino. Inmediatamente Agrelo recibió la pena de exclusión de la carrera por su error y por haber eliminado dos autos de la final, sin mencionar que el Chevrolet de Agustín terminó muy golpeado.

"Viedma siempre nos trató un poco mal y ahora el auto estaba funcionando bien", dijo Castellano, "Lo que más bronca me termina dando es que teníamos cosas para probar en una carrera exigente como es esta y no pudimos observar absolutamente nada de cómo se podía comportar el auto. Viedma es un parámetro, más sabiendo que con los trabajos que hicimos encontramos un equilibrio mejor en el auto."

Si bien el sistema de campeonato de TC no obliga a sumar puntos fuertes de movida (ya que alcanza con entrar entre los 12 primeros en septiembre) el mérito de Castellano y su equipo era grande, ya que después de pelear el título en 2018, el coche perdió completamente el rumbo en 2019. Ahora puede que el rumbo esté puesto y que la esperanza de llegar a fin de año con chances sea grande.

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