La primera fila de la final de la Clase 2 estaba conformada por los ganadores más rápidos de las series, como eran el Nissan March de Marcos Fernández y el Toyota Etios de Renzo Blotta, mientras que detrás aparecía Emanuel Abdala junto a Juan Ignacio Canela, que buscarían puntos importantes en pos de la lucha por el campeonato.

En la largada, Fernández lograba prevalecer en la punta mientras que la segunda colocación se la disputaban Guevara, Emanuel Abdala, Canela y Blotta. Allí salió vencedor Blotta, mientras Mateo Núñez, Yerobi y Conci caían en el clasificador durante los primeros metros de carrera.

Della Motta intentaba avanzar en los primeros puestos, aunque todo se neutralizaba en el circuito pampeano y hacía su ingreso el auto de seguridad cuando daba inicio el primer giro de 20 pactados. Además, la familia Leánez estaba en boxes por sendos problemas mecánicos en los autos de Facundo y Diego.

Mientras se circulaba a marcha lenta para acondicionar el circuito, se producían algunos despistes en el fondo del pelotón por la rotura de motor de Facundo Rotondo, que debió hacerse a un costado para detener su vehículo y abandonar la carrera.

Iniciada la tercera vuelta, regresaba la velocidad al trazado de Toay y Marcos Fernández mantenía la vanguardia, siempre acosado por Blotta que pretendía la superación. Guevara tercero también quería avanzar en las posiciones y peleaba con Blotta por el segundo lugar. Guevara por fuera consiguió ser el nuevo escolta, mientras que Blotta derrapaba para mantener su auto dentro del asfalto.

Sin embargo, el aceite regado por Rotondo durante la neutralización generó varias salidas de pista, entre ellas la Tedeschi, Della Motta y el puntero parcial Fernández. Dicha situación generó el ascenso a la vanguardia de Guevara, para soñar con su primera victoria en la categoría. En tanto, Fernández perdió algunas posiciones, y estos despistes generaron un nuevo ingreso del auto de seguridad en 4 vueltas de 20 pactadas.

En el séptimo circuito se reinició la competencia con Guevara como líder, escoltado por Blotta y tercero aparecía Canela, necesitado de la victoria para asegurar la candidatura al título.

Mientras Guevara buscaba escaparse adelante, Canela presionaba a Blotta por la segunda colocación. Sin embargo, una mala tracción de Guevara generó un roce con Blotta, lo suficiente para que Canela, ni lerdo ni perezoso, saltara a la punta de la competencia.

Expectantes, en el cuarto y quinto lugar, se encontraban los hermanos Abdala, Emanuel y Christian, que, a sabiendas de que uno de ellos peleaba por el título, esperarían la chance para poder avanzar. En este caso, ambos aprovecharon los problemas de Guevara y Blotta para subir a la segunda y cuarta posición en 8 vueltas de carrera.

Canela necesitaba el ancho de la pista para funcionar sin perder la punta y no podía escaparse de Emanuel Abdala y de Blotta, que pretendían avanzar y recuperar en el clasificador cuando iniciaba la segunda mitad de competencia.

Sin embargo, de un momento a otro, se producía un golpe de escena para el campeonato. Emanuel Abdala, el líder del campeonato, que venía segundo y justo cuando buscaba saltar a la punta, sufría la rotura de una goma y debía ingresar a boxes para realizar el cambio respectivo.

Pero esto no calmó a Canela, que trataba de ser lo más prolijo posible mientras su auto se mostraba inestable en su andar. A su vez, Blotta insistía en sus chances de atacar y saltar a la vanguardia. La familia Abdala no iba a darse por vencida, porque Christian lograba superar a Blotta para ser el nuevo escolta y ayudar a su hermano con una posible victoria para que no sumen sus rivales.

Metros después a concretar la maniobra sobre Blotta, Christian Abdala aprovechó la inestabilidad de Canela para meterse en la parte interna y transformarse en el nuevo puntero de la carrera, a falta de 7 giros para el final.

A partir de allí, el piloto patagónico se escapó y estableció diferencias respecto de sus rivales. Canela recuperaba terreno y era el nuevo escolta de Abdala, mientras Ortega también quería meterse en la discusión con Blotta por los puntos y el podio.

Blotta se pasaba de largo en la recta opuesta y perdía terreno en el clasificador, mientras Ortega superaba a Canela y era el nuevo segundo de la competencia. Unos metros después, el rafaelino devolvía gentilezas al tucumano, y allí aprovechaba Marcos Fernández para volver al podio después de recuperar terreno perdido al principio de la competencia.

Sin embargo, el podio le duraría poco a Fernández porque Ortega logró adelantarlo y volvía al tercer puesto de la carrera, aunque Fernández aprovechó un desliz del corredor norteño para recuperar lo que había sido suyo.

Ortega perdía algunas posiciones con Torres y Guevara que lograban avanzar en el clasificador. Mientras tanto, Christian Abdala se encaminaba hacia la meta, la victoria y los puntos para ayudar a su hermano de cara a la definición del título.

Luego de 20 vueltas, cayó la bandera de cuadros y decretó el triunfo de Christian Abdala, escoltado por Juan Ignacio Canela y tercero terminó Marcos Fernández.