Luego de las series, había mucha expectativa sobre lo que podía generarse en la final de la Clase 3, gracias al rendimiento mostrado por tres de las marcas que amagaron con pelear en Bahía Blanca por la victoria y no llegaban a cumplir ese objetivo.

En este caso Chevrolet con Castellano, Ford con Pernía y Santero con Toyota eran los máximos candidatos, luego de adjudicarse los respectivos parciales matutinos.

Cuando todo parecía que iba a ser largada normal, una puerta se mostraba abierta en la grilla del trazado nicoleño. La advertencia llegaba desde el primer cajón, el ocupado por Jonatan Castellano, por problemas eléctricos en la unidad Chevrolet Cruze número 16.

Los inconvenientes hicieron que el piloto de Lobería no solo largara en el último lugar, sino que había una vuelta previa más, y esto beneficiaba a Leonel Pernía y a Julián Santero, sus rivales directos por la victoria.

Pasado este hecho, se daba vía libre a los integrantes de la división mayor del TN, y Pernía era superado por Santero en la largada, mientras que detrás Merlo le ganaba la posición a Muñoz Marchesi para colocarse tercero.

Sin embargo, la lucha por la punta se sostenía por la presión que ejerció Pernía sobre un Santero que, sobre la mitad de la segunda vuelta cronometrada, perdía el liderazgo ante el representante de Tandil. Apenas se cumplía el tercer giro, ocurría la primera neutralización de la carrera, por la detención del uruguayo Mauricio Lambiris por problemas mecánicos.

Un par de giros posteriores se reiniciaba la carrera, donde Pernía mantenía la punta, mientras que Santero comenzaba a sufrir con el escape de su Toyota Corolla. En tanto, Matías Muñoz Marchesi ratificaba el gran rendimiento de su auto y escalaba posiciones, al superar primero a Merlo en el tercer puesto, y luego capturar el lugar de escolta sobre el corredor mendocino.

Quien también se recomponía de lo realizado en las series era Jerónimo Teti, que subía a la cuarta posición y se convertía en el mejor usuario de Chevrolet, luego de lo acontecido con su vecino Castellano.

Al llegar a la mitad de la carrera, regresaba la neutralización por diversos abandonos acontecidos entre la séptima y octava vuelta de competencia. Entre los desertados estaban Mariano Werner y Fabián Yannantuoni, ambos por problemas de motor.

Luego de dos giros, volvía la velocidad a San Nicolás y Pernía se escapaba en la punta de la carrera, mientras que Muñoz Marchesi se mantenía como escolta y las posiciones se establecían. En el pelotón del medio se generaban algunos roces, nuevas deserciones en pista y caídas en el clasificador. Sin embargo, esto no inmutó al puntero que se fue directo hacia el final de la carrera.

Tras 21 vueltas caía la bandera de cuadros y se decretaba el triunfo de Leonel Pernía, siendo la primera victoria con el Ford y, a su vez, el sexto fabricante que consigue el lugar más alto del podio con el piloto de Tandil al volante. Fue escoltado por Matías Muñoz Marchesi y tercero terminó Carlos Javier Merlo.