La marca italiana volverá al Campeonato Mundial de Resistencia para la temporada 2023, con un Hipercoche de manufactura propia. El anuncio fue hecho por el presidente de la compañía, el italo-americano John Elkann.

“En más de 70 años de competición, hemos llevado a la victoria a nuestros prototipos en las pistas de todo el mundo, experimentado con soluciones tecnológicas de vanguardia. Innovaciones que nacen en los circuitos y hacen de cada automóvil producido por Ferrari en Maranello único. Con el nuevo programa hypercar en Le Mans, Ferrari relanza su apuesta deportiva y confirma la voluntad de ser protagonista en los campeonatos mundiales más fuertes del automovilismo”

Con este regreso, Ferrari vuelve a lo que fueron los orígenes del fabricante en 1947. Si bien la asociación con la Fórmula 1 es indudable, hay que recordar que la casa de Maranello supo competir en forma oficial y privada durante varias temporadas en las 24 Horas de Le Mans y en lo que se denominó Campeonato Mundial de Marcas primero y de Sport Prototipo después.

Entre 1953 y 1973, años en los que Ferrari estuvo de manera oficial, obtuvo diversos títulos de marca, y venció en varias ocasiones en la mítica prueba francesa. El primer triunfo fue en 1949 (sin campeonato creado), en forma privada, con el italiano Luigi Chinetti y el británico Peter Mitchell-Thomson con el modelo 166 Mil Millas. Sin embargo, el primero del equipo oficial fue en 1954, con el argentino José “Pepe” Froilán González y el francés Maurice Trintignant con el 375 Plus. A partir de allí, continuaron los éxitos y los pilotos para los itálicos.

Además de las alegrías, también hubo tristezas en el programa Sport de Ferrari, como las muertes de Alberto Ascari en 1955, el mexicano Pedro Rodríguez en 1971 o el incidente fatal de Ignazio Giunti en 1971, por nombrar algunos de los corredores más reconocidos.

Vale destacar que La Argentina tuvo representantes oficiales con Ferrari como el mencionado Froilán González (1954), Juan Manuel Fangio (1956) y Carlos Alberto Reutemann (1973). Salvo el santafesino, que consiguió podios, tanto Fangio como Froilán ayudaron a que el “Cavallino Rampante” consiga vencer en Le Mans y Sebring, dos pistas legendarias para la Resistencia.

Otra de las carreras importantes fueron los 1000km de Buenos Aires, donde también hubo triunfos italo-argentinos, como el de 1955 con Enrique Saenz-Valiente y José María Ibañez, o también la primera victoria general del sueco Ronnie Peterson y el australiano Tim Schenken en 1972.
Aunque sus rumores apuntaban a ser con un triple programa junto al proyecto Indycar, los directores decidieron solo hacer Formula 1 y apostar por el regreso al WEC.

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