El español completó la penúltima etapa de la sexta prueba puntuable para el Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA con una ventaja de 27.4 segundos, en una frenética batalla. Sébastien Ogier superó a Thierry Neuville en el último tramo del día para recuperar la segunda posición.

Sordo, que logró aquí una dramática victoria en el último suspiro en 2019, ganó uno de los seis tramos sobre tierra en el norte de la isla con su Hyundai i20. Pero eso fue suficiente para estirar su ventaja de la noche a la mañana por 10 segundos antes de la corta etapa final de mañana domingo.

"Es una buena sensación estar aquí", comenta. "Esta tarde estaba gestionando mis neumáticos. Es importante mantener a Seb y Thierry atrás. Los conozco a ambos y lo intentarán mañana. Tenemos que mantenernos concentrados hasta el final, hasta el último kilómetro."

Teemu Suninen, segundo después de la etapa del viernes con su Ford Fiesta, abandonó el podio para dejar a Ogier y Neuville en un titánico duelo por el segundo puesto y la oportunidad de reducir la desventaja con el líder del campeonato Elfyn Evans.

El francés Ogier desplazó a Neuville en el tramo inicial, sólo para que el belga invirtiera los puestos en la última especial de la mañana. Pero un pequeño error cerca del final del último tramo del día permitió a Ogier volver a recuperar la segunda posición por 1,5 segundos.

"Lo intenté atacando y perdí quizás 2 segundos en el puente cuando llegué un poco pasado de frenada. Cuando atacas al máximo pasan estas cosas", aseguró el piloto del i20.

Ogier ganó cuatro tramos con su Toyota Yaris y el dúo estuvo a medio minuto del otro duelo. Evans perdió tiempo esta mañana con un enfoque demasiado cauteloso para proteger sus neumáticos mientras que, en cambio, demasiada agresivo por la tarde le costó segundos vitales.

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